En esta ocasión estuvimos en la sede de la empresa de luz Endesa gritando bien alto: NINGÚN NEGOCIO CON NUESTRAS NECESIDADES. Colocamos pancartas y repartimos panfletos a las personas que pasaban por allí, muchas de ellas afectadas por próximos cortes de luz en sus hogares por no poder pagarla. Mientras que repartíamos panfletos, informábamos a la gente que en Málaga hay más de 60.000 hogares en situación de pobreza energética, que las puertas giratorias son un negocio para que expresidentes reconvertidos a empresarios se enriquezcan y que muchas vecinas de nuestros barrios están sufriendo multas y procesos judiciales por no poder hacer frente a las facturas de la luz, cada vez más abusivas.
Frente a esta situación, cánticos como “Endesa, tu negocio es mi pobreza”, “Si no tienes, no pagas”, “Su riqueza es nuestra miseria” o “ Luz, agua y gas, derecho universal” nos acompañaron en una mañana de caló, mucho caló....
Seguimos en la calles, reclamando justicia social, suministros básicos para cubrir nuestras necesidades, amnistía social y, por supuesto, que VIVIR DIGNAMENTE EN MÁLAGA ES UN DERECHO.